Consejos para antes de casarte

“El matrimonio es como una jaula; uno ve a los pájaros desesperados por entrar, y a los que están dentro igualmente desesperados por salir”.

Montaigne

¡Qué difícil es la vida matrimonial! Claro, cada quien habla como le va en la feria, pero dudo que haya muchos que afirmen lo contrario.

Personalmente mi vida de casado ha sido difícil, creo que es natural, ya que analizado fríamente, el matrimonio es algo antinatural, una imposición social difícilmente compatible con nuestra esencia animal.

Aún así, si no puedes escapar, tengo algunos consejos que darte, toma los que te sirvan:

· Escoge a la flaca: Esa chica voluptuosa sin duda te parece sumamente atractiva, pero todo eso acabará….hasta el suelo. Entre menos cosas haya que se puedan caer, mejor. Ahora tal vez digas: “eso no importa, la amo” pero créeme, no siempre será así…créeme!

· Fíjate en la madre: Es muy probable que tu futura esposa acabe como su madre, es casi inevitable, date una idea de su futuro, observa detenidamente a tu suegra.

· No uses el sexo como referencia: Si fue bueno antes puede ser malo después o viceversa.

· Si tiene un carácter del demonio, este no mejorará, sino todo lo contrario, piensa si deseas pasar los días con una cascarrabias.

· Convive antes con su familia: Difícilmente podrás hacer a su familia un lado, evítate futuros malos ratos, si no los soportas piénsalo dos veces antes de casarte.

· No tengas hijos hasta que tengas dos ó tres años de casado, este es un tiempo suficiente para saber si las cosas van a funcionar o no, no te compliques más la vida ni le causes angustias a una pobre criatura inocente.

· Si te va del demonio en el primer año, haz un esfuerzo por mejorar las cosas, si no se puede es mejor separarse, no prolongues lo inevitable.

Mejora la raza: Si tu fin es tener hijos, fíjate en sus genes, no perpetúes genes malos.

· “Casi siempre que un matrimonio se lleva bien, es porque uno de los esposos manda y el otro obedece”, cualquiera que seas, si así eres feliz, ¡te felicito Suertudo!

· No gastes mucho en la boda, existen muchas posibilidades de que te divorcies en el primer año, (no lo digo yo, revisa las estadísticas), los que de verdad te aprecian, que son los que valen la pena, no les importará.

· Si eres infiel como el demonio, ¿Para que te casas?

· Los malos hábitos no desaparecerán y los buenos puede que desaparezcan, tómalo en cuenta.

Pues he ahí unos cuantos, sacados la mayoría de mi propia experiencia, si recuerdo más, luego los agrego.

En parte escribo esto porque me acabo de enterar que un par de primos cercanos se van a casar, “nadie escarmienta en cabeza ajena” dice le proverbio, por más que les aconsejé que no lo hicieran ahí van, desesperados por entrar a la jaula maldita… les deseo la mejor de la suertes, y aunque espero equivocarme, creo que la necesitarán.